La imposición de las cenizas nos recuerda que nuestra vida en la tierra es pasajera y que nuestra vida definitiva se encuentra en el Cielo.
La Cuaresma comienza con el Miércoles de Ceniza y es un tiempo de oración, penitencia y ayuno. Cuarenta días que la Iglesia marca para la conversión del corazón.
Las palabras que se usan para la imposición de cenizas, son:
“Concédenos, Señor, el perdón y haznos pasar del pecado a la gracia y de la muerte a la vida”; “Recuerda que polvo eres y en polvo te convertirás"; “Arrepiéntete y cree en el Evangelio”.
Ésta será la última presidida por el Santo Padre Benedicto XVI que el 28 de febrero dejará su cargo. Recemos y demos gracias por Él, y pidamos por su sucesor para que mantenga fiel la tradición de la Iglesia de Dios.
Editado por Antonio
Administrador del blog
CON JESÚS EN MI VIDA
No hay comentarios:
Publicar un comentario